Desde el principio tuvimos claro que la formación es una herramienta clave para el tipo de producto, original y de calidad, que queríamos ofrecer.
Los propietarios de la heladería Setè Gel de Blanes (Girona), Pere Vila y Nuri Torrelles, se incorporan tarde a la heladería. Vienen de mundos tan alejados de este oficio como la cerámica y la pintura (Pere Vila), la gestión cultural (Nuri Torrelles), el comercio y la mercadotecnia en el caso del hijo de la pareja, Aniol Vila. Es un caso ejemplar de una familia que tras la crisis ha sabido reciclarse para dar un giro a sus profesiones, a través de la formación con pesos pesados en formulación como Carlos Arribas, Pablo Galiana. y Enrique Coloma.
En Seté Gel cada miembro de la familia aporta lo que ha aprendido de sus oficios anteriores: creatividad en el producto (Pere Vila), pedagogía en la transmisión del espíritu de Setè Gel (Nuri torrelles) y promoción del establecimiento a través de las nuevas tecnologías (Aniol Vila).
La heladería comienza su periplo en mayo de 2013 y se estrena en la campaña de 2016 con un segundo local en el centro de Blanes, con el objetivo de alargar la campaña de verano. Cuentan con la colaboración y asesoramiento de la hija de Pere y Nuri, Isolda Vila Torrelles, una verdadera experta en análisis sensorial.
Una de las maneras más pedagógicas de recorrer los contenidos del último número de Arte Heladero es apreciar cómo poco a poco van ganando visibilidad e importancia los acabados. Es uno de los caminos necesarios hacia la propia identidad, que pasa por la importancia creciente de la presentación del helado.
La tauromaquia es la fuente de inspiración de una creación que se sitúa a medio camino entre el postre helado y el individual. Firmada por Christophe Domange, Faena es la imagen de portada del nuevo AH171.
