Anhcea muestra un optimismo moderado ante el Plan de Desconfinamiento
El presidente de la Asociación Nacional de Heladeros Artesanos (Anhcea), Marco Miquel, valora positivamente el Plan de Desescalada del Confinamiento anunciado ayer por el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez. Dicho Plan contempla 4 fases (fase 0, Fase 1 Inicio, Fase 2 Intermedia, Fase 3 Avanzada) y tendrá un ritmo distinto atendiendo a la situación sanitaria y epidemiológica de cada provincia e isla.
“Estamos contentos porque podremos hacer lo que más nos gusta, elaborar helado, pero también preocupados por las repercusiones en nuestros negocios de unas medidas que llegan tarde para la heladería”, aclara. El Plan de Sánchez permite que las heladerías puedan abrir y vender al detalle a partir del día 4 de mayo en el marco de la fase 0, sin la necesidad de cita previa, pero sólo helado para llevar, sin consumir dentro del establecimiento y respetando la distancia de seguridad entre clientes, de dos metros. El 11 de mayo marca la entrada en la fase 1 y en ella las heladerías podrán ocupar hasta el 30% de la capacidad (mesas) de la terraza, pero deberá seguir sin permitir el consumo dentro del local. “A partir de aquí, es difícil precisar alguna fecha más de la reactivación económica del sector” porque el desconfinamiento variará en cada zona en función de la situación sanitaria y epidemiológica. Esto quiere decir, prosigue Miquel, que seguiremos un mes más cumpliendo medidas para adaptar las heladerías al nuevo escenario, pero será una venta al detalle. "No será hasta finales de junio que podremos funcionar al 50-60% del servicio que ofrecíamos tradicionalmente”, se lamenta.
“Por todo esto no estamos contentos del todo, podremos abrir finalmente pero son medidas que llegan tarde. Nos hemos tenido que esperar a la apertura de toda la restauración”, asegura. "No son soluciones definitivas, argumenta, porque la reincorporación del personal laboral a las heladerías será lenta. Será un ingreso al ámbito laboral en precario”, añade.
Otro de los interrogantes que arroja el nuevo escenario será ver cómo responde la clientela a la reactivación de las heladerías y la adopción de las medida de seguridad e higiene.