Menú Bajo Cero, la apuesta del verano de La Posada del León de Oro
Este verano el restaurante La Enotaberna, de La Posada del León de Oro ha incorporado el helado en el día a día de su cocina. Es su forma de contrarrestar el calor madrileño de una forma original. El helado no solo sirve para jugar con las texturas, sabores y temperaturas en un plato concreto o en el postre, sino que pasa a ser el protagonista del menú íntegro, desde el primero, al segundo y tercero. Un menú con nombre propio, Bajo Cero.
El menú se compone de Salmorejo con helado de parmesano y aceite de albahaca, Steak Tartar de solomillo de buey cortado a cuchillo con crujiente de pan y helado de mostaza, y Sopa de chocolate blanco con helado artesano de violetas. El primero es un clásico del verano que este año viene con aires más frescos. Un plato que parte de todo lo bueno de la receta original del salmorejo, con un toque de parmesano en forma de bola de helado. Tal y como afirman desde el restaurante, “el aroma de la albahaca aporta un toque a la versión tradicional”.
El Steak Tartar de solomillo de buey con crujiente de pan y helado de mostaza muestra una versión de esta especialidad universal a través del arte del cuchillo para elaborar un plato con texturas. La mostaza de Dijon se presenta a través de un helado que acompaña y potencia el tartar. Para finalizar el postre, Sopa de chocolate blanco con helado artesano de violetas, se compone de una suave crema de chocolate blanco y recupera uno de los sabores más emblemáticos de la capital, la violeta, para convertirlo en todo un icono del establecimiento. Un bocado con sabor a Madrid que pone el broche de oro a un menú de lo más refrescante.
La Posada del León de Oro es una antigua corrala del siglo XIX, convertida en un hotel singular. Está localizado en el corazón de Madrid, a escasos metros de la Plaza Mayor, Puerta del Sol, Palacio Real y Triángulo del Arte (Museo del Prado, Museo Thyssen-Bornemisza y el Museo Nacional Reina Sofía).