Nos gusta más el dulce
Recientemente se ha publicado la segunda edición del Anuario de Confitería, llevado a cabo por Cadbury España. Un informe que ha puesto de manifiesto que cada español gastó en 2007 una media de 43,9 euros en productos relacionados con la confitería: chocolates, dulces y chicles. Se trata de una cifra que continúa con la tendencia a que se incremente el consumo.
De hecho, el informe señala que el sector del dulce en España se encuentra en un momento de plena expansión, incrementándose un 14% el gasto entre los últimos cinco años. Así, se ha pasado de los 38,5 a los 43,9 euros gastados por persona. Además, se espera que el consumo siga creciendo hasta alcanzar en 2011 los 45,9 euros por persona al año.
Este buen ritmo en el sector está muy por encima del registrado en la media europea, con un consumo un 3% mayor respecto al registrado cinco años antes. No obstante, hay que tener en cuenta que el consumo español continúa muy por debajo del de otros países europeos, como Dinamarca (213,5 euros por persona al año), Noruega (206,5 euros por persona), o Suiza (185 euros por persona).
Según el anuario, el aumento de población inmigrante en España está contribuyendo "de forma importante al crecimiento del sector de dulces y afines", ya que este segmento de población gasta hasta un 40% más que el resto de españoles en productos como chocolate, repostería, galletas, helados, nata montada, frutos secos, croissantería o galletas rellenas.
De hecho, el informe señala que el sector del dulce en España se encuentra en un momento de plena expansión, incrementándose un 14% el gasto entre los últimos cinco años. Así, se ha pasado de los 38,5 a los 43,9 euros gastados por persona. Además, se espera que el consumo siga creciendo hasta alcanzar en 2011 los 45,9 euros por persona al año.
Este buen ritmo en el sector está muy por encima del registrado en la media europea, con un consumo un 3% mayor respecto al registrado cinco años antes. No obstante, hay que tener en cuenta que el consumo español continúa muy por debajo del de otros países europeos, como Dinamarca (213,5 euros por persona al año), Noruega (206,5 euros por persona), o Suiza (185 euros por persona).
Según el anuario, el aumento de población inmigrante en España está contribuyendo "de forma importante al crecimiento del sector de dulces y afines", ya que este segmento de población gasta hasta un 40% más que el resto de españoles en productos como chocolate, repostería, galletas, helados, nata montada, frutos secos, croissantería o galletas rellenas.
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