Rubén Álvarez se forja en heladería ayudando a Angelo Corvito a preparar los cursos que impartía durante años en la Chocolate Academy. Álvarez pasó una buena temporada de su trayectoria como profesor de esta escuela. Hoy los rasgos que le definen en heladería son los mismos que ya lo caracterizaban en su etapa anterior como pastelero. Hablamos de la autoexigencia, el refinamiento y la evolución a través de colaboraciones con profesionales que inspiran su trabajo y le permiten llevar el helado a la excelencia.

Entiende la innovación dentro de unos márgenes muy determinados, una creatividad que tiene como punto inicial productos típicos de la heladería como el turrón, la almendra marcona, la cobertura negra, el café, la avellana del Piamonte y el limón, entre otros muchos.

Rubén Álvarez está detrás de proyectos tan interesantes como 33/35 Studio para la restauración y Esneu, orientada al consumidor final.